El derrame de petróleo continúa

El desastre ecológico causado por el hundimiento de una de las plantas de British Petroleum (BP) continúa. Al parecer los intentos por contener las fugas de la Deepwater Horizon, han sido insuficientes, ya que el derrame de petróleo continúa, y no sólo del pozo de 22 pulgadas, sino que de otras 18 perforaciones.

Sagalevich, científico del Instituto Shirshov de Oceanología de Rusia advierte que el fondo marino del golfo de México “ha quedado fracturado ‘irreparablemente’ y nuestro planeta debe comenzar a prepararse para un desastre ecológico ‘más allá de toda comprensión’ a menos que se emprendan ‘medidas extraordinarias’ para detener el flujo masivo de petróleo hacia el océano”.

El científico y un grupo de colegas del Instituto han sido los únicos con autorización para investigar y visitar el lugar del siniestro tras el llamado que hizo la misma British Petroleum, poco después del hundimiento de una de sus plataformas. Según las últimas investigaciones, Deepwater Horizon estaría lanzando al océano más de dos millones de galones de petróleo por día, por lo que las medidas para detener esta catástrofe ambiental son urgentes.

A esta altura sólo quedan dos opciones para detener eficazmente el derrame, la primera sería dejar que se seque el tanque, lo que se produciría en aproximadamente 30 años, arrasando con toda la flora y fauna del Atlántico, y la segunda opción es hacer estallar nuclearmente los restos de la plataforma. Sin embargo las opciones que se postulan son evitadas a toda costa por el actual presidente de los Estados Unidos, Barak Obama y, mientras siga la espera, el resto del ecosistema marino se extinguirá lentamente y para siempre.

En Rusia ya se han ocupado en más de una ocasión las detonaciones nucleares para sellar pozos de gas y petróleo. El resultado: de cinco intentos, cuatro fueron exitosos. «La detonación nuclear del fondo marino está comenzando a sonar sorprendentemente factible y apropiada», dijo Michael E. Webber, Ingeniero Mecánico de la Universidad de Texas, mientras que Christopher Brownfield, investigador visitante sobre política nuclear y ex naval culpa a la BP por la ineficiencia, «ya hubiéramos demolido este pozo con explosivos desde hace un mes. Y todavía vemos con insoportable suspenso mientras la BP va torpemente usando y desechando plan tras plan para recuperar su petróleo y cubrir su propiedad«.

Además de la catástrofe marina, la amenaza se extiende, ya que los mismos agentes contaminantes están siendo absorbidos por las nubes, las que luego liberan los líquidos en forma de lluvia tóxica, destruyendo todo a su paso e incluso podrían poner fin a América del Norte, según estudios de científicos rusos y estadounidenses.

Según las últimas investigaciones, la petrolera BP, ha comenzado desde el pasado sábado 10 de julio, una nueva tarea para reemplazar el tapón colocado en una de las grietas más grandes de salida del crudo; pero si esta nueva solución fracasara, los grandes de la petrolera pretenden esperar hasta agosto, cuando uno de los dos pozos de “alivio” esté terminado.

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