Una de las principales acciones que crean inseguridad en las personas con problemas de autoestima es negarse a sí mismo las cualidades y atributos.
Sin embargo, no es lo único, existen factores que influyen en la imagen que tenemos de nosotros y que a su vez se proyecta a los demás.
Autoestima
Es un conjunto de percepciones, pensamientos, evaluaciones, sentimientos y tendencia de comportamientos dirigidos hacia uno mismo, nuestra manera de ser y hacia los rasgos de nuestro cuerpo y carácter. En definitiva, es la evaluación perceptiva de un ser.
Según expertos, no cuidar el autoestima afecta la calidad de vida y a las relaciones sociales.
Por tal motivo, es fundamental aprender a identificar cuáles son esas acciones nocivas que pueden afectar cada día la personalidad y ponerle freno antes de que sea tarde.
Reproches comunes de baja autoestima
Exigirse demasiado
Ponerse metas altas conducen a la frustración, por lo tanto, procura hacer menos caso de lo que dicen los demás y ponte objetivos realistas que puedas conseguir poco a poco.
Descalificarse
“No valgo para esto, nada se me da bien, soy una torpe”. Repetir estos mantras cada día en tu mente te hará sentir inútil y hará que no puedas cumplir lo que te propones porque te crees capaz.
Valora tus habilidades de forma positiva, basta de auto exigencias y date tiempo para aprender. En cuanto encuentres tus fortalezas y las valores como mereces, podrás conseguir todo lo que te propongas.
Compararse
Las comparaciones son odiosas y hasta cierto punto es verdad. Si lo haces a menudo, procura que sea con un enfoque positivo centrándote en aquello que sirva para motivarte y ser mejor, no para destruirte.
El hábito de compararse sólo para resaltar nuestros defectos, complejos e inseguridades es la forma más rápida de destruir nuestra autoestima.
Centrarse en los errores
Hay personas que incluso cuando logran una meta, miran atrás y señalan los errores. Estos forman parte del proceso, pero para cuidarse, mantenerse motivados y tener una autoestima alta, es importante que los errores no se conviertan en el patrón con el cual se miden los logros o se maximicen las debilidades.
Mentalidad negativa
“Seguro que todo sale mal”, “verás como no lo consigo” y otras frases que pronunciamos de forma cotidiana, pueden hacernos más daño del que pensamos.
Borra esa inseguridad de tu mente y verás cómo serás capaz para afrontar cualquier circunstancia.
