Existen ciertos errores comunes que se cometen a la hora de mantener una manicure. La mayoría no comprende que no se trata sólo de ir a hacerse las manos y olvidarse del asunto, porque cuando llegas a tu casa y conforme pasan los días, hay que ir manteniendo el esmalte y cuidando las uñas para que no se desgasten ni se pongan de color amarillo.
Ahora te entregamos una lista con cuatro errores comunes, así puedes tenerlos presentes y no cometerlos nunca más.
- No usar un bol con aceite de oliva: una noche antes remojar las uñas en un bol con aceite de oliva tibio y colocar las uñas por unos 15 minutos, luego lo secas sin usar agua de este modo hidrataremos las uñas y cutículas.
- No remover el esmalte con frecuencia: si dejas el esmalte en tus uñas semanas y semanas, no importa que tan bueno sea, acabará por mancharlas de amarillo, haciendo que después sea imposible lucirlas al natural. Debes dejar el pintauñas máximo 15 días.
- No elegir una buena lima: Este punto es muy importante ya que los movimientos que ejerzas a la hora de limar tus uñas también son definitorios para que no se rompan ni se escamen.
- No usar base: cuando te haces la manicure siempre te aplican base primero. Esto es porque este producto previene que las uñas se manchen y ayuda a que el esmalte se fije mejor.
- No ablandar tus uñas con agua tibia: siempre al hacer la manicure es bueno que tus uñas hayan reposado durante algunos minutos en agua tibia. Esto ayuda a ablandar la uña para que sea más fácil de cortar y limar, además suaviza las pieles y cutículas permitiendo removerlas de forma simple.
- No aplicar una última capa de brillo: si quieres que el esmalte dure más y no se pele tan fácil, aplica siempre al final una capa de brillo para protegerlo.
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