Más de un cuarto de los hombres sufre de problemas sexuales

Mientras que en los más jóvenes sufren por eyaculación precoz, los mayores presentan dificultad para mantener la erección.

A pesar de que muchas veces lo esconden más, son muchos los hombres que se ven enfrentados a sufrir un problema de índole sexual. El doctor Daniel Alvo, urólogo de Clínica Avansalud, explica que la disfunción sexual masculina “se asocia a todos los trastornos que se producen en el hombre en todas las etapas de la actividad sexual. Existen por lo tanto fallas en el deseo, excitación, erección, orgasmo y eyaculación”.

Las tasas de disfunción sexual masculina varían según la población estudiada, tanto en el tipo de  problema, como la frecuencia total. “Se calcula que más de un cuarto de los hombres tiene, o ha tenido, algún problema en su sexualidad”, explica el especialista. El tipo de trastorno varía según la edad. En el caso de los jóvenes el problema más frecuente es la eyaculación precoz, “definida como una eyaculación producida antes de la penetración a la pareja, o con una duración de muy poco tiempo, cercana al minuto, en el acto sexual “, asevera. Además, detalla que el promedio de tiempo hasta la eyaculación normal es cercano a los 4 minutos desde la penetración.

A medida que el hombre avanza en su edad se va haciendo cada vez más frecuente el problema eréctil, que el facultativo define como la “incapacidad de alcanzar o mantener una erección suficiente para un desempeño sexual satisfactorio”. La frecuencia de esta situación después de los 40 años va aumentando de 10 a 20% hasta alcanzar en algunos estudios sobre el 50% a los 70 años.

Son dos las causas de estas patologías, a juicio del doctor Alvo. La primera es psicológica, que produce o agrava una disfunción sexual, mientras que la segunda es orgánica, como son los problemas de irrigación sanguínea al pene, trastornos hormonales, enfermedades o uso  de fármacos, que también impactan fuertemente al paciente en su esfera mental.

Tratamientos

Los tratamientos dependen del tipo de trastorno que se esté abordando. En general los problemas de eyaculación, deseo, orgasmo y algunos de la erección responden a una causa psicológica, por tanto requieren de un fuerte apoyo en esa área. Mientras que los problemas denominados orgánicos, como son los de falla en la irrigación sanguínea en el pene, alteraciones de las hormonas masculinas, tiroideas y prolactina, alteraciones del colesterol, lesiones anatómicas peneanas como la fibrosis de cuerpos cavernosos y el uso de algunos fármacos como los anti depresivos, entre otros, requieren de un enfoque más dirigido a la corrección del problema y que erradique o atenúe el causal directo que produce la disfunción. “Si bien es cierto hay problemas de difícil manejo, como son los producidos por las alteraciones en la inervación neurológica del pene y algunos trastornos serios de la irrigación, un alto porcentaje de las alteraciones de la sexualidad pueden ser tratados en forma satisfactoria para el paciente”, comenta el especialista.