Qué sabes de la ansiedad social y cómo tratarla

Ansiedad social

La ansiedad social afecta a las personas que tienden a enrojecerse, sudar, temblar, sentir que el corazón les late muy rápido o pueden presentar náuseas o malestar estomacal.

Este trastorno es considerado como un problema de salud mental, el cual se ha acentuado en los últimos tiempos.

¿Qué es la ansiedad social?

Es un temor persistente que puede ocasionar problemas para desenvolverse en entornos sociales y llega afectar de manera física y emocional a quien lo padece.

Es un trastorno mental crónico que trae consigo síntomas de miedo y ataques de pánico en circunstancias sociales  puntuales, como reuniones con muchas personas, una cita, una entrevista de trabajo o simplemente interactuar con alguien más.

Incluso, algunas personas con ansiedad social, presentan molestias físicas ante situaciones tales como: dar un discurso, participar en deportes, bailar o tocar instrumentos musicales en el escenario.

Un detalle importante es que en las personas que son extremadamente tímidas, el trastorno de ansiedad social suele comenzar durante la juventud.

Causas de la ansiedad social

La causa más clara por la que se puede padecer ansiedad social es hereditaria, ya que se trasmite genéticamente.

Aunque también existe controversia con esta posibilidad, debido a que aún no se sabe con certeza por qué algunas personas del mismo grupo familiar pueden tenerla y otras no.

Expertos añaden que aparte del componente genético, existen causas sociales y ambientales que generan el padecimiento y todavía no pueden ser totalmente explicadas.

Factores influyentes

Bien sea por un mal desarrollo de las habilidades sociales o algún tipo de desorden hormonal, se puede generar este miedo.

Síntomas

Náuseas y malestar estomacal.

Agitación abrupta y dificultad para respirar.

Taquicardia o palpitaciones fuertes del corazón.

Sudoración excesiva y sentimiento de incertidumbre.

Sentir miedo al tener que conocer nuevas personas.

Evitar cualquier lugar donde haya personas cerca.

Sentir vergüenza o miedo a lo que puedan decir otras personas.

Tener una actitud introvertida como mala postura y evitar contacto visual.

Tratamiento

En muchos casos, se recomienda acudir a terapia y usar medicamentos. En este sentido, las opciones más viables son las terapias conversacionales, los antidepresivos, ansiolíticos y beta bloqueadores. Éstos pueden ayudar a aumentar la confianza y mejorar la capacidad de interactuar con otra gente.

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