¿Qué es el Yoga de la Risa y sus beneficios?

Yoga de la Risa

El Yoga de la Risa es un concepto nacido en la India que se basa en la afirmación de que “cualquier persona puede reír sin ninguna razón concreta, sin necesidad de chistes, de humor ni comedias”.

Por otro lado, en los últimos años multitud de investigaciones han demostrado que la risa tiene un impacto positivo en varios sistemas de nuestro organismo. Sin embargo, nuestro cuerpo no reconoce la diferencia entre la risa real o la risa simulada.

¿Qué ejercicio se practica con el Yoga de la Risa?

Esta disciplina es el resultado de combinar  ejercicios de respiración o meditación con unos de risa. Se aborda como una acción corporal, mediante un sistema que permite que la persona ría continuamente durante 15 a 20 minutos.

Es sencillo de seguir y cualquier persona puede hacerlo, independientemente de su estado de ánimo.

Durante la sesión, la risa se inicia como un ejercicio grupal y pronto se convierte en una risa real y contagiosa, gracias al contacto visual y el cultivo de una actitud infantil y juguetona.

De esta forma se obtienen todos los beneficios fisiológicos, bioquímicos y psicológicos que se le atribuyen a la carcajada.

Beneficios

1-. Produce serotonina: la hormona del bienestar

La risa es gratis, divertida, contagiosa  y sanadora. Es la mejor manera de desconectar  y de ver la vida desde un punto de vista más positivo, de sumar bienestar a partir de algo simple.

2-. Aumenta la energía y combate la tensión muscular

La risa provoca un aumento de la entrada de oxígeno y del flujo sanguíneo, mejora de la función de los vasos y disminuye la presión arterial. Por eso, la dinámica del yoga de la risa ayuda a proteger el corazón, aumenta la energía, reduce el estrés y facilita la concentración.

3-. Suaviza las emociones negativas

“Practíquelo y verás los cambios”,  como afirma el doctor Madan Kataria, creador de la técnica, quien agrega “no nos reímos porque somos felices, somos felices porque nos reímos”.

Al reír, nuestro cuerpo libera endorfinas, que tienen un gran impacto sobre la bioquímica del cerebro y del sistema inmunitario. Estas endorfinas actúan como analgésico y eliminan el malestar, reduciendo los niveles de cortisol, la hormona del estrés.

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