La aromaterapia es una medicina complementaria ampliamente practicada, que utiliza aceites esenciales de plantas aromáticas, flores, hojas, semillas, cortezas y frutas para curar.
Los aceites esenciales se extraen normalmente mediante un proceso de destilación al vapor y los mismos suelen usarse:
Holísticamente
Los aceites se usan, frecuentemente con masajes, para tratar trastornos emocionales y físicos.
Clínicamente
Utilizados en combinaciones con los tratamientos de la medicina científico u oficial.
Estéticamente
Este es su uso más extendido, en el que los aceites se utilizan en quemadores o difusores en casa. También se añaden a los baños.
Funcionamiento de la aromaterapia
Actúa sobre nuestro sentido del olfato y mediante la absorción al torrente sanguíneo. Aproximadamente 15% del aire que inhalamos se dirige al techo de la nariz, donde los receptores olfatorios transportan los olores directamente a sistema límbico del cerebro.
En las antiguas civilizaciones usaban la aromaterapia de muchas maneras como, por ejemplo, en el masaje, los baños, las medicinas e incluso para embalsamar cuerpos.
Se cree que la aromaterapia puede estimular la eliminación de sustancias químicas que juegan un papel en la liberación de emociones (piensa como incluso el simple olor a cera de suelo puede hacerte volver rápidamente a la época de las aulas).
Historia
El concepto se usó originariamente y al mismo tiempo en China, Egipto, el Oriente Medio y por los Nativos Americanos, siendo después introducido en Europa por los Romanos.
La práctica de la aromaterapia moderna se le atribuyó principalmente al químico francés René-Maurice Gattefossé, quien inició la investigación de los poderes curativos de los aceites esenciales en el primer cuarto de siglo después de observar cómo el aceite de lavanda parecía ayudar en la curación de una quemadura severa que tenía en una mano.
Utilización
La aromaterapia parece tener el efecto más beneficioso en las dolencias menores, problemas digestivos, síndrome premenstrual, enfermedades relacionadas con el estrés y erupciones de piel. Algunos aceites esenciales como el aceite de árbol de té se utilizan ampliamente en sus propiedades antisépticas.
Es extremadamente improbable que la aromaterapia cure enfermedades más importantes, por lo que no recomendamos que se utilice en estos casos en sustitución de la medicina convencional.
Sin embargo puede usarse para aliviar el estrés psicológico experimentado por las personas que sufren una patología grave.
Terapias con aceites esenciales
Aceite de oliva
Te puede ayudar a tener la piel más suave, pues te ayuda a hidratar y previene las arrugas.
Miel
Es una excelente opción para una piel sana. Aporta una gran cantidad de minerales porque tiene efectos antisépticos y cicatrizantes.
Manzanilla
Es una hierba con la cual se puede acompañar un buen baño refrescante. Antes de salir de la ducha agrega a un recipiente con agua tibia de lavanda, gracias a eso así lograrás dormir como un bebé.
Avena
El producto garantiza hidratación y nutrición a todo tipo de piel. Es aconsejable en caso de alergias o picazón, ya que alivia las molestias.
Bicarbonato de sodio
Ayuda a neutralizar la acidez de la piel, eliminando las toxinas del cuerpo e incluso los malos olores.
Hierbas energéticas
Las hojas de albahaca, canela, romero y menta, también pueden prepararse. Se cocinan por 10 minutos en cuatro litros de agua y luego se agregan a un recipiente. Antes de salir de la ducha, colócalo en tu cuerpo.